El Lobas Global Atac Oviedo sigue avanzando en el capítulo de renovaciones. Otra de las jugadoras con mucho peso en la plantilla, la central Miriam Cortina, ha confirmado su continuidad un año más a las órdenes de Manolo Díaz, de modo que iniciará ya su sexta campaña de azul.

“Desde que llegué siempre he estado muy a gusto tanto con el club como con las diferentes jugadoras con las que he compartido vestuario y sobre todo con el entrenador”, explica Miriam Cortina, que todavía se frota los ojos tras el ascenso recién conseguido a la Liga Guerreras Iberdrola (División de Honor Élite). “La temporada ha sido muy buena, mucho mejor de lo esperado porque la iniciábamos con mucha incertidumbre al ser una categoría nueva, teníamos mucho miedo de cómo iban a ser los equipos y la competitividad se sabía que era mucho más alta”, comenta, “estábamos con ganas pero jamás nos hubiéramos imaginado estar en la parte alta de la tabla y tampoco nos creíamos poder ascender y menos de la manera en que lo hicimos, quedando primeras y a falta de una jornada”.

Para la central gijonesa tener la oportunidad de jugar en la máxima categoría es “algo que no se puede ni explicar” con palabras. “Es un sueño yo creo que para todas y la verdad es que es un sueño hecho realidad en especial para mí”, afirma, “llevo muchos años intentándolo y el balonmano es una parte fundamental en mi vida”.

Miriam Cortina es consciente de que no todo va a ser bonito en la Liga Guerreras Iberdrola. “Sabemos que van a cambiar muchas cosas”, asegura, “venimos de ganar muchos partidos y sabemos que no va a ser tan fácil, que vamos a tener que luchar muchísimo, los partidos van a ser muy complicados y seguramente tengamos que sacar más fuerzas de donde no las haya”. La central azul espera poner su granito de arena aportando “como siempre lo máximo”, si cabe “un poco más” porque ahora “las exigencias son mayores”, y confía en el equipo “porque nos caracteriza luchar hasta el final y no dar ningún partido por perdido”.